Hablemos de estiramientos

Hola a tod@s de nuevo! Hoy os traemos un nuevo post desde el servicio de fisioterapia donde queremos hablar sobre los estiramientos estáticos en el tratamientos y prevención de lesiones.

En primer lugar, queremos responder a la pregunta de si es importante estirar para prevenir lesiones. Hay diferentes autores científicos que se han preguntado esto y han realizado diferentes estudios, llegando en casi todos ellos a la misma conclusión: NO. No existe una relación entre la realización de estiramientos con la reducción de lesiones.

En mi práctica diaria veo como diferentes personas y deportistas los practican tanto antes como después de sus entrenamientos por lo que considero importante ver cual es el objetivo de ello.
El tejido musculotendinoso tiene propiedades viscoelásticas, por lo que una posición o un estiramiento mantenido, produce pequeñas deformaciones temporales del músculo, con una gran implicación clínica y funcional. Debido a esta viscoelasticidad, un estrés pequeño pero mantenido, puede hacer que el tejido expulse agua y termine por deformarse (Creep). Este fenómeno es conocido como estrés-relajación.
Como los husos musculares encargados de la propiocepción responden a la tensión, si este fenómeno se produce (deformación), y la tensión se reduce en las fibras intrafusales, ahora van a subestimar la tensión que llega al tejido, lo que modificará la descarga de estos receptores, y por ende alterará la propiocepción.
Además, esta modificación viscoelastica, va a generar un descenso en el aprovechamiento de la energía elástica, que hace que nuestros músculos y tendones funcionen como muelles aprovechando el estiramiento de los mismos para la siguiente contracción y producción de energía. Esto se resume en lo que muchos estudios han demostrado, viendo como los estiramientos pasivos tienen una influencia negativa sobre diferentes actividades como son la economía de carrera, la velocidad y el sprint, la fuerza y potencia, el salto vertical, etc.

Por lo tanto, con los estiramientos conseguiremos una mejora de la flexibilidad, pero esto puede repercutir negativamente en otras capacidades físicas como la fuerza, potencia, velocidad… que son muy importantes durante la práctica deportiva.
Por otro lado, cuando hablamos de movilidad siempre debemos pensar en movilidad funcional. Es decir, la movilidad va a estar condicionada a las actividades que realicemos por lo que la movilidad que necesite una persona/deportista para la óptima realización de una tarea será diferente en función de cada persona/deportista.

Cuando se produce una restricción de movilidad normalmente se produce por una adaptación de nuestro sistema y debemos ver si la restricción realmente es perjudicial y debe ser entrenada. En este contexto diferentes estudios han analizado diferentes métodos para la mejora de movilidad. Estos estudios observan como hay otras vías para el trabajo de movilidad que aporta mayores beneficios para las personas/deportistas como son los estiramientos activos y el trabajo excéntrico.
Además, estos métodos a diferencia de los estiramientos estáticos no generan restricciones en el rendimiento.

Además, cuando pensamos en el efecto de los estiramientos en el alivio del dolor y contracturas hay estudios que niegan este efecto, encontrándose con poco o ningún efecto en el dolor y la espasticidad. Finalmente, encontramos el aspecto subjetivo y los efectos psicosomáticos (efecto placebo) de los mismos donde los pacientes refieren sensación de confort, mejora de la flexibilidad, alivio de la tensión muscular, etc. que siempre deben ser tenidos en cuenta y darles la importancia que merecen dentro de las preferencias del paciente.